jueves, 20 de febrero de 2014

Especies del Parque de María Luisa

En esta sección de nuestro blog queremos dar un repaso a algunas de las especies más emblemáticas del  Parque de Mª Luisa, parque por excelencia para los sevillanos, en la conmemoración del centenario de su apertura, el 18 de abril de 1914. Debido a que nuestra Escuela está inmersa en el Parque, son muchas las ocasiones que tenemos de enseñar a nuestros alumnos la diversidad de su flora y, en más de una ocasión, de su fauna; a través de estas imágenes, queremos rendir un pequeño homenaje a este magnífico enclave con el deseo de que lo siga siendo durante muchos años para disfrute y admiración de todos.

Ejemplares de wachintonias, Washingtonia robusta, apareciendo por detrás de las glicinas, Wisteria sinensis. Pérgolas cercanas a la Glorieta de los Leones y el Monte Gurugú. Foto: M. Martín Cacao. Finales de marzo de 2008.



Plaza de América a finales de mayo de 2007. Al fondo, ejemplares de palmas datileras, Phoenix dactylifera; en primer término, platabandas de petunias, Petunia x hybrida. Foto: M. Martín Cacao.






Rosales, Rosa ‘La Sevillana’, en la Plaza de España. Abril de 2012. Foto: M. Martín Cacao.



Ejemplar de jacaranda, Jacaranda ovalifolia, en los aledaños del Pabellón Real. Plaza de América. Mayo de 2010. Foto: M. Martín Cacao.




Árbol del amor, Cercis siliquastrum, en flor. Marzo de 2011. Foto: M. Martín Cacao.





Araucarias de Bidwill, Araucaria bidwillii, en la glorieta de los Hermanos Machado, catalogadas como árboles ejemplares de la ciudad. Febrero de 2007. Foto: M. Martín Cacao.


   







Ejemplar de Aesculus x carnea ‘Briotii’, cercano a la Glorieta de los Hermanos Machado. Conocido como castaño de Indias de flor roja, es más propio de parques y jardines de zonas templadas y los dos ejemplares del Parque, son los únicos existentes entre los parques públicos de la ciudad. Abajo, detalle de la inflorescencia. Foto: M. Martín Cacao.
 
Siluetas de almez, Celtis australis (izda.) y wachintonias, Washingtonia robusta (Dcha.) entre el Museo de Artes y Costumbres Populares y el Monte Gurugú. Marzo de 2011. Foto: M. Martín Cacao.





Platanus x hispanica,
Plátanos, en la Avda. de Hernan Cortes. Abril de 2013. Foto: M. Martín Cacao.





Ejemplar de arce, Acer negundo, en invierno.
Estanque de los lotos. Foto: M. Martín Cacao








Koelreuteria paniculata en flor. Plaza de América. 23 de mayo de 2007. Foto: M. Martín Cacao.




 







Seto de espireas, Spirea cantoniensis, en las cercanías del Monte Gurugú. Abril de 2010. Foto: M. Martín.



Rosa banksiae ‘Lutea’
Inmediaciones de la Fuente de las Ranas.
Marzo de 2007. Foto: M. Martín.

Rosas en la Plaza de América. 
Mayo de 2012. Foto: M. Martín Cacao
 
En muchas praderas del Parque pueden verse, en invierno, flores de la hierba de las almorranas, Ranunculus ficaria, mezclada con el césped y las matas de bigotes, Ophiopogon japonicus; en el parque abunda especialmente, Ranunculus ficaria subsp. ficariiformis. 



Uno de los jazmines de invierno, Jasminum mesnyi, en flor en las vallas exteriores del Parque.  Marzo de 2009. Foto: M. Martín Cacao.


Grupo de árboles enmarcando la fuente de la Glorieta de Rafael de León, de 1980. Entre ellos, varios naranjos y destacando sobre todos, un ejemplar de almez, Celtis australis, árbol mediterráneo que constituye una especie emblemática de la que en el Parque existen muy buenos ejemplares. Junio de 2008. Foto: M. Martín Cacao.

Algunos de los mejores ejemplares de membrillero de Japón, Chaenomeles japonica, arbusto de impresionante floración, se hallan en la Glorieta de la Concha. Febrero de 2013. Foto: M. Martín.


En la Glorieta de Bécquer, el famoso grupo escultórico de Lorenzo Coullaut Valera (Marchena, Sevilla, 1876-Madrid, 1932), no se entendería sin el no menos famoso ejemplar de ciprés de los pantanos, Taxodium distichum, plantado a finales del siglo XIX y que constituye uno de los árboles ejemplares de Sevilla.


miércoles, 19 de febrero de 2014

Fuente de los Leones


En 1911 se encarga al famoso arquitecto y paisajista francés Forestier la transformación de los jardines de San Telmo en un parque público. Su idea fue articular el parque en dos ejes. El primero recorre la Fuente de los Leones, la de las Ranas y los Lotos. El segundo las avenidas de Hernán Cortés y Pizarro, llenando los espacios de glorietas, rotondas y fuentes. Se inspira en la tradición de los jardines del Alcázar de Sevilla y el Generalife granadino, incorporando estanques y decoraciones con azulejos y cerámicas.

La Glorieta queda enmarcada entre el Monte Gurugú y la Fuente de las Ranas, con un cerramiento de setos de mirto. Su distribución es completamente simétrica, tanto en las combinaciones de especies (Mirtos, clivias y naranjos), como en la disposición de los cipreses, las diferentes palmeras y los cipreses calvos del final. Descendiendo del Monte Gurugú por la escalera que sale a la cascada, encontramos unas pérgolas, con diversas plantas trepadoras de tallo leñoso, entre las que destaca por sus blancas flores la bignonia (Pandorea jasminoides). Las pérgolas con antiguas cerámicas se ha conservado tal y como lo diseño Forestier a comienzos del siglo XX. La fuente de forma poligonal está adornada con unos llamativos y mansos leones de 170 cm. de altura, sentados con el surtidor en sus fauces que vierte el agua al estanque, el autor original fue el escultor andaluz Manuel Delgado Brackembury, posteriormente han sido sustituidos por los que vemos en la actualidad obra de Juan de Abascal, la cerámica es de Manuel Ramos Rejano. Consta de 4 estanques separados por paseos practicables que confluyen en una fuente baja de traza circular en la que podemos contemplar un quinto león de cerámica. Originalmente fabricado por Cerámicas Ramos Rejano y en la actualidad por Mensaque Rodríguez y Cía.

A continuación encontramos el jardín, con diseño geométrico, delimitado por setos de mirto, en el se desarrollan naranjos, naranjos morunos (Citrus aurantium var. myrtifolia), palmeras datileras, palmeras canarias, cipreses y rosales; en la parte central tenemos un estanque surtidor rodeado por un seto de mirto, a su alrededor unas pérgolas lucen en primavera exuberantes de rosas. Cierran el jardín dos fantásticos ejemplares de ciprés de los pantanos (Taxodium distichum) que dan paso a la Fuente de las Ranas.

Cumplimentan la decoración grandes jarrones y macetones de cerámica, que han sido restaurados hace un par de años, como el resto de la glorieta.


Alumno: Javier Madrigal

Trabajo de clase, información extraida de diferentes páginas de internet.